por JUAN ANTONIO CORDERO —
‘En Cataluña, la llamada “construcción nacional” e identitaria se ha desarrollado siempre en detrimento de los servicios, los derechos y las libertades públicas; son las prioridades del nacionalismo. Las élites que deciden en Cataluña se escandalizan con más facilidad cuando se toca la identidad que cuando se toca la calidad de los servicios públicos. Es lógico que al final, las víctimas del ‘establishment’, que en este caso son los policías autonómicos, acaben recurriendo a lo primero para llamar la atención sobre lo segundo’.